lunes, agosto 16, 2010

Encuentro y desencuentro

Me siento defensor de que la narrativa es una sola cosa, y que todos sus medios distintos no son sino facetas de la misma, es decir, tenemos nuestra historia, y puede ser un cómic, una novela, una película, un videojuego...

Pero.. pásense por aquí. Lo cual (el artículo se llama "Si queréis hacer películas, dejad los juegos") nos lleva a un punto interesante: ¿Cuál es el límite de traducción de una técnica a otro medio? ¿Valen todas las técnicas para todos los medios, aunque sea con una ligera adaptación?

Mi teoría es que sí. Rotundamente. Toda técnica de un medio puede usarse en otro, si la adaptamos bien, y la usamos bien. La clave, como siempre, está en usarlo bien.

Lo que es indispensable para traducir estas técnicas de uno a otro medio es, como a la hora de traducir idiomas, conocer bien los medios en los que se va a trabajar, el de partida y el de llegada, de donde sacamos el truco y a dónde nos lo llevamos.

Hay que conocer la base de cada medio, que es lo que hace único a ese medio, su esencia, para poder respetarla y poder seguir teniendo un medio que funciona, y no un híbrido sin posibilidad de descendencia.

Si no, nos encontraremos con esos videojuegos en los que se juega un minuto tras cinco minutos de vídeo, y llega otro vídeo, y así ad nauseam... O cómics llenos de splash pages muy espectaculares, pero que no aportan nada, o películas que usan el 3d sólo como excusa para cobrar la entrada más cara, o... bueno, ya sabéis por dónde voy.

Nos leemos.

2 comentarios:

Valerian dijo...

Pero cuando diseñas una historia, la forma (llamando forma al medio, el idioma, el estilo) puede ser parte intrínseca de la propia historia.

Por seguir el simil de los idiomas. Hay chistes o elementos de un idioma a otro que no se pueden traducir y se pierden en la traducción.

Se puede argumentar que eso a veces es un detalle menor como un juego de palabras en un momento dado o alguna expresión concreta. Pero puede ser que llegue más allá.

Puede ser que el Quijote sólo tenga gracia porque están muy aclarados los estilos aúna en un mismo libro (por ejemplo con temas de qué cosas dicen y cómo hablan los personajes). Puede que muchas obras del alemán tengan ese factor que, al traducirlas se pierdan bastante. No quiero ya hablar cuando hablas de idiomas no occidentales, las sutilezas que probablemente anden en los cuentos japoneses o en las historias de los textos sagrados que se pierden serán montañas.

Que puedes contar una historia en múltiples medios. Pues algunas sí. Otras no. Otras tienen que ser abiertas porque si no son rellenadas por alguien pierdeen su esencia (algunas de rol). Otras para poderse contar bien necesitan unos recursos gráficos determinados que no se pueden plasmar de otras formas.

Otras pueden ser desnudadas y transplantadas de un lugar a otro perdiendo únicamente elementos secundarios, como cuando leemos algo que tenía sólo un juego de palabras.

Pero creo generalizable el que toda historia se puede contar en cualquier medio.

katakraos dijo...

Volvemos al mismo punto, que es que, sea como sea, la técnica hay que usarla bien, y de forma que funcione, esté tomada de otro medio o no. He ahí la dificultad de la traducción y adaptación, ya sea de un idioma a otro, o de un medio a otro.

Creo que la cuestión está más en saber trasladar los hechos a la forma en que quieres narrarlo, y pese a lo que se piensa normalmente, hacer una adaptación no es más fácil que tirar de una idea original. El adaptador ha de tomar una idea, una historia, y le queda la parte más dura, trabajarla para convertirla en algo que respete la esencia del original, pero que esté contado de forma distinta. Nunca se podrá ver una adaptación idéntica de un medio a otro, porque la forma afecta al fondo. Pero lo que hace falta es analizar bien el material del que partamos y luego trabajarlo, depurarlo, desarrollarlo hasta que tome la forma que queremos, una forma funcional, que resulte sólida, que su estructura sea fuerte y sostenga de forma correcta y precisa todo el montaje.

Evidentemente, esto falla en la mayoría de los casos, no hay más que ver una buena parte de las novelas o cómics o videojuegos adaptados al cine, o la adaptación al cómic de películas por parte de DC o Marvel, que es lo que me viene ahora a la cabeza.

La historia es que para adaptar Watchmen al cine, por ejemplo, sigo pensando que no vale con calcar los planos de las viñetas, sino que la propia estructura de la película tendría que haber sido totalmente diferente (y ya puestos, menos cámara lenta y menos gore, que no pegaba ni a tiros). Sé que uso a esta película como ejemplo recurrente de adaptación chungaleta, y a Blade Runner como la adaptación perfecta, pero me valen para tener un baremo en el que apoyarme.

La idea es que cuando adaptas de un medio a otro tienes que tener bien presente la idiosincrasia del medio al que vas a dirigirte y del que vienes, y esto no es tan fácil como suena.

Si en tu forma de contar la historia el medio es parte integrante de ella... tendré que buscar cuales son los elementos básicos de tu historia, cuales son los que realmente la definen, y llevarlos a mi terreno para contar tu historia a mi manera y hacerla mía, y que a la vez siga siendo tu historia.

Y sí, son cosas que ya he dicho muchas veces... lo que nunca he dicho es que fuera a ser fácil XD

¡Un saludo!